¿me amas?
no quiero saber si me aprecias, si me tienes cariño, si me admiras, no
¿me amas?
Tres veces le hizo la misma pregunta Jesús a Pedro
"Simón, hijo de Jonás, ¿me amas?" -- Juan 21: 16
A veces es necesario repetirse las preguntas hasta conseguir ser honesto con uno mismo.
Aunque cause tristeza, aunque abra heridas.
Porque el verdadero amor contiene una medida de dolor.
Solamente el hipócrita pasa por el mundo sin hacerse preguntas o sin examinar el fondo de su corazón.
El número de veces que necesitas la pregunta dependerá del tiempo que tardes en entender el alcance de tu respuesta.
Comentarios
Publicar un comentario