"No siento en el mundo más
que tan mal paguito tengas,
siendo tú de tan buen metal.
Compañera no regañes,
que yo hago mi ropita un lío
y el campo no tiene llaves.
Compañero no regañes…
Ojalá conmigo fueras;
nunca caen los rayitos
donde la tormenta suena.
Ay gitanillos
de las estijeras,
vení a sentarse
a mi cabecera."
el principio de una leyenda con
diálogos extraños; yo quiero saber de ti, y tu me hablas de trabajo